Robótica, medios informáticos y lenguajes digitales conforman la muestra que se presenta hasta fines de agosto.
Nos encontramos en tiempos en los que la tecnología digital es clave tanto para la interacción social como para la utilización de las herramientas que nos proporcionan nuestros medios de supervivencia.
Los medios digitales y la informática se han convertido hoy por hoy en el lenguaje por excelencia del que es seguro no se puede o no se podrá prescindir. Este lenguaje, como todo lenguaje tiene su propia lógica y leyes.
Cesar Aira dice “Hubo un momento, en este último medio siglo, en que la humanidad dejó de saber cómo funcionan las máquinas que usa.(...) Hoy día todos usamos los artefactos como usaban antaño las damas el automóvil: como “cajas negras” con un Input (apretar un botón) y un output (se enciende el motor), en la más completa ignorancia de lo que sucede entre estos dos extremos. (...) Hoy vivimos en un mundo de cajas negras”.
Almacén de Corazonadas, 2006, de Rafael Lozano- Hemmer, Instalación interactiva.
La ignorancia de este lenguaje no es inocente. Podemos hacer uso de él, pero no entenderlo. Estamos rodeados de “cajas negras” en un misterio casi absoluto en lo que a a informático y ciencias de la computación respecta.
Si el artista es aquel quien puede deconstruir una situación, el arte electrónico viene entoces a socavar lo más profundo de este lenguaje digital para deconstruirlo y cuestionarlo. El artista se sitúa así como desestructurador y reconstructor del lenguaje que hoy es el de la ciencias informáticas, para desenmarañarlo y cuestionarlo.
En la muestra Emergentes, actualmente en la Fundación Telefónica, un grupo de deconstructores de este lenguaje informático presenta en variados soportes tecnológicos sus formas de arte.
Un universo que ya forma parte de nuestro acontecer diario. Un universo, con un lenguaje que es preciso aprehender.
Datos de la muestra
Emergentes en Espacio Fundación Telefónica
Del 12 de junio al 31 de agosto de 2008
Curador: José - Carlos Mariátegui
Se agrade la colaboración de Diego B. para la producción fotográfica